Corazones rotos

¿Existe alguna manera de evitar los corazones rotos?
Esta pregunta me la hice por primera vez en el 2015 pues fue cuando me “rompieron el corazón” y todavía recuerdo ese amargo sentimiento como si hubiese sido ayer, recuerdo la ropa que vestía, el clima, los aromas, recuerdo todo con cada detalle.


Si te pudiese describir cómo es ese dolor diría que primero comienza como un golpe en el estomago que hizo que me quedara sin aire, entonces mi corazón comenzaba a latir tan fuerte ante tal golpe y trataba de mandarle señales a mi cuerpo para que este pudiera reaccionar, entonces es ahí donde las palpitaciones, y por ende, las pulsaciones se aceleraban causándome una terrible ansiedad soltando levemente lágrima por lágrima sin poder conseguir una respiración adecuada que al final toda esta serie de sentimientos terminaron provocándome nauseas.

¿has sentido cómo se siente eso? me intriga saber si la manera que yo me sentí, lo hiciste tú también. Sé que todos procesamos el dolor de diferente manera, sin embargo el dolor es un sentimiento que me causa demasiada curiosidad justamente por cómo reaccionamos todos ante diferentes circunstancias.


Debo admitir que puedo ser culpable de romper algunos corazones y no me siento orgullosa de eso. En el momento que he decidido terminar mis relaciones eso fue lo que percibí o al menos eso me hicieron creer.


Me hago responsable de aceptar que a lo mejor no en todas mis relaciones sentí el corazón roto pero es un hecho que me dolieron otras cosas en el proceso.

Pero lo que quiero contar hoy es que me encuentro aquí escribiendo de algo tan trillado como los corazones rotos, a lo mejor soy una especie de complice ante las almas desgarradas por este triste sentimiento porque solo se obtiene el corazón roto donde hubo amor.


En los pasados 4 años he llevado terapia para poder sanar mis heridas del pasado y no repetir los mismos errores que constantemente me abruman, en cada relación y claro de con constancia y práctica te vas haciendo más consciente de tus propias heridas, que eventualmente aprendes poco a poco a manejarlas.


Es claro que muchas veces tenemos miedo a repetir los dolores del pasado pero solo pocos saben lo complicado que se vuelve una relación cuando todo aparentemente marcha bien porque después de varias relaciones tóxicas no saber cómo recibir la felicidad sin sentir culpa por ser feliz. A lo mejor solo estoy alucinando en mis propios pensamientos, pero sucede que constantemente te estas peguntando si eres merecedor de todo ese cariño y atención.


Por ahí alguien bastante cercano a mí me hizo un comentario sobre entender que si cuestionas todo el tiempo, básicamente es una señal de que “ahí no es” pero entonces ¿Cuándo sí es?

Y tristemente cuando comienzas a aceptar todo lo bonito porque quieres dejar de escuchar las voces de tu subconsciente donde intentas auto-sabotearte, todo se comienza a desmoronar.


Básicamente es así como me he sentido los últimos 21 días de pura incertidumbre, solo recibiendo migajas de amor… Carajo ¿Por qué me quiero tan poco? constantemente me estoy preguntando eso una y otra vez y lo más triste de esto es de que tengo una lucha interna entre seguir a mi corazón o simplemente dejarlo ir…


A pesar de que han pasado varios años y varias rupturas, sigo sentada frente a mi escritorio tratando de comprender cómo es que siento ese corazón roto.


Pero a pesar de que se siente como la primera vez, una calma enorme reina en mi cuerpo y me pregunto si ¿el motivo de esa calma a pesar de tener el corazón destrozado se debe a que ingenuamente me gusta creer que sientes lo mismo por mí? o porque simplemente aprendí a soltar a las personas y abrazar mis dolencias.


Aún no sé la respuesta pero sé que eventualmente este amargo momento pasará y volveré a priorizarne a mí misma como solía hacelo antes de que me dejaras de nuevo con el corazón roto.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *